Lo solicitó el concejal Roberto Páez, del Frente de Todos. Consideró que el gobierno municipal debería reforzar la seguridad ciudadana para asegurar el cumplimiento de las normas en las salidas recreativas.
Desde que la semana pasada comenzaron las salidas recreativas en Mar del Plata, la sociedad pareció quedar partida en dos: los que salen de acuerdo a las pautas preventivas, a 500 metros del domicilio y con distanciamiento social, y los que no respetan ningún criterio sanitario a la hora del esparcimiento.
El jueves pasado, en el primer día habilitado para las salidas, el gobierno municipal consideró esencial el compromiso social para que se respeten las normas. El coordinador de Gabinete, Alejandro Rabinovich, aseguró que el Estado municipal no puede controlar el comportamiento de todos los habitantes. “Ningún Estado del mundo puede hacerlo”, afirmó.
El concejal Roberto Páez (Frente de Todos) cree, sin embargo, que el Ejecutivo local debe “reforzar la medidas de seguridad ciudadana, las sanitarias y de distanciamiento social en todos los sectores de alta circulación del partido”. Así lo dejó escrito en un proyecto de comunicación presentado en el Concejo Deliberante.
“Se sugiere se profundicen tales medidas en el sector costero y los espacios verdes”, apuntó el edil, y hasta recomendó colocar señalización en esos sitios para garantizar la circulación con distanciamiento social.
El decreto del intendente Guillermo Montenegro especificó que este tipo de salidas no podrán realizarse por centros comerciales a cielo abierto, playas, parques y plazas.
“El frente costero y los espacios verdes son los lugares preferidos por los marplatenses para desarrollar actividades al aire libre”, hizo notar Páez.
El edil opositor advirtió la necesidad de evitar imágenes como la de los runners de la Ciudad de Buenos Aires y otros puntos del país “donde se vio cómo la apertura de actividades y la falta de control estatal y responsabilidad individual han generado un cóctel preocupante”.
Marcó además que “a medida que se abren nuevas actividades, aumenta el riesgo de contagio del Covid-19”, y mencionó que constató “un natural incremento de personas por las calles, en el uso del transporte público en horas pico y en las filas de los bancos”.
En esa dirección, puntualizó “la imperiosa necesidad de recordarle a la población la alta contagiosidad del virus y su potencial dañoso para la salud de todas las personas”, que puede “generar focos de contagio en forma rápida y con consecuencias difíciles de controlar y predecir”.
Desde la semana pasada, el partido de General Pueyrredon se encuentra en la fase 4 de la cuarentena, que permite “una sustancial apertura”, señaló Páez. “Esto nos debe llevar a extremar todas las medias necesarias para asegurar el distanciamiento social, el autocuidado y el cuidado del otro”, agregó.